Recuerdo que hacía sol, viajábamos con ilusión, esperando cumplir nuestros sueños al final del camino. Queríamos volar, volar tan alto que nadie pudiera estropearnos nada. Las risas se escuchaban, las canciones no paraban de sonar y, por el cristal, se veía la campiña italiana, la toscana pasaba ante nuestros ojos al ritmo de las canciones de Joaquin Sabina, en unas horas llegaríamos a nuestro próximo destino, no recuerdo si nos dirigíamos hacia Roma, hacia Pisa o hacia dónde, solo recuerdo que, soñábamos, reíamos y cantábamos, mientras nos dirigíamos por carreteras desconocidas buscando la tierra prometida.
¿Sueñas? ¿Vives? ¿Imaginas? ¡Ven! Visita mi propio cuento de hadas, dejate sorprender por una soñadora.
miércoles, 2 de noviembre de 2011
la bella
Recuerdo que hacía sol, viajábamos con ilusión, esperando cumplir nuestros sueños al final del camino. Queríamos volar, volar tan alto que nadie pudiera estropearnos nada. Las risas se escuchaban, las canciones no paraban de sonar y, por el cristal, se veía la campiña italiana, la toscana pasaba ante nuestros ojos al ritmo de las canciones de Joaquin Sabina, en unas horas llegaríamos a nuestro próximo destino, no recuerdo si nos dirigíamos hacia Roma, hacia Pisa o hacia dónde, solo recuerdo que, soñábamos, reíamos y cantábamos, mientras nos dirigíamos por carreteras desconocidas buscando la tierra prometida.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)