Todo tu poder.

Caminas. Paso claro y seguro. Sin dudas. Adentremonos en ese mundo. De pronto, está la puerta ante ti, flaqueas un momento...quizás sea mejor alejarse, huir, no afrontar esa nueva vida, ese nuevo mundo. No sabes realmente que espera tras esa puerta, quizas algo  mejor, quizas algo peor. ¿Qué hacer? Hay dos opciones: o entras y te arriesgas, o te quedas fuera y te quedas sin saber que hubiera pasado al entrar.
Si, decididamente entras. Nada. Ningun miedo. Ninguna duda te va a hacer echarte hacia atras. Tu puedes. Tu eres poderoso. Tu controlas lo que haces y, TU puedes. Tu puedes ser valiente, tu puedes hacer que todo vaya genial, porque si, TODO está en TUS manos.